Monjes cerveceros: una historia divina
Sumérgete en el diverso universo de la cerveza artesanal, desde técnicas de elaboración únicas hasta las mejores cervecerías para visitar.

¿Se imaginan a un grupo de monjes con hábitos y sandalias, reunidos alrededor de un caldero gigante, elaborando cerveza? Pues no es una escena de una película de fantasía, sino una realidad de la Edad Media. En aquellos tiempos, los monasterios no solo eran centros de oración y estudio, sino también importantes productores de cerveza.
Los monjes, con su disciplina y dedicación, se convirtieron en maestros cerveceros, experimentando con diferentes ingredientes y técnicas para crear las mejores cervezas de la época. De hecho, muchas de las innovaciones que disfrutamos hoy en día, como el uso del lúpulo, se las debemos a ellos. ¡Gracias, monjes cerveceros, por su contribución a la humanidad!
Pero no crean que los monjes se dedicaban a la cerveza solo por placer. En realidad, tenía un papel importante en su vida diaria. Durante los periodos de ayuno, la cerveza era una fuente vital de nutrientes, ya que proporcionaba calorías y vitaminas sin romper las restricciones alimentarias. Además, la cerveza se usaba para agasajar a los peregrinos, para comerciar y para financiar las actividades del monasterio.
Así que ya saben, si alguna vez visitan un monasterio antiguo, no se sorprendan si encuentran una cervecería en sus instalaciones. Y si tienen la oportunidad, no duden en probar su cerveza artesanal, elaborada con la misma pasión y dedicación que hace siglos. ¡Salud y bendiciones!